Por Ahora Guerrero
El gobierno municipal de Chilpancingo en 2023, bajo la administración de la alcaldesa Norma Otilia Hernández Martínez, promovió una presunta oferta de trabajo para capacitar a jornaleros agrícolas con el fin de obtener una visa de trabajo en Estados Unidos; fueron engañados y reclutados en el rancho Izaguirre, recientemente descubierto por madres buscadoras como centro de entrenamiento y exterminio de un grupo delictivo.
En una entrevista para Radio Fórmula, con Azucena Uresti, Roberto, uno de los sobrevivientes, narró que junto con un grupo de personas acudieron al ayuntamiento de Chilpancingo para participar de un programa que promovió la entonces administración municipal.
El sobreviviente data que se trataba de una oferta de trabajo en donde serían capacitados en Guanajuato, para luego obtener una visa especial de trabajo en Estados Unidos, sin embargo nunca llegaron a su destino.
El grupo de aproximadamente 55 personas, fue abandonado en el rancho Izaguirre, en Jalisco, aunque el sobreviviente omite por seguridad en nombre de la empresa, ésta, sería Big Force, según los datos arrojados de búsqueda.
Los jornaleros trabajaron durante un año de manera forzada, bajo la amenaza de que no podían regresar pues perderían el derecho a la visa a la que estaban buscando acceder.
Relató que en una ocasión dos de sus compañeros salieron del área limitada del rancho, por lo que de inmediato civiles armados fueron tras de ellos; uno logró salir corriendo y otro más fue golpeador brutalmente por los armados, por lo que entendieron que se trataba de una situación distinta a la que ofrecieron las autoridades.
La convocatoria por parte de la empresa Big Force, fue publicada el 15 de febrero por el ayuntamiento de Chilpancingo, anunciando el apoyo a 55 jornaleros agrícolas, sin embargo una vez enviados, nunca hubo seguimiento por parte del gobierno para conocer la situación de los trabajadores.
De acuerdo con Roberto, incluso autoridades de la UAGro habrían participado en el reclutamiento, aunque no precisó el tipo de acciones que tuvo la universidad en el tema.
Precisamente en este último tema, la mañana de este miércoles, la Administración Central de la Universidad Autónoma de Guerrero, aclaró que en ningún momento se trabajó en conjunto con el gobierno de Chilpancingo, ni se participó en el reclutamiento de personas.
“La institución educativa tiene convenios con el ayuntamiento de Chilpancingo para que nuestros alumnos puedan realizar su servicio social y prácticas profesionales, pero no tiene ningún convenio para reclutar personas u ofrecer trabajo dentro o fuera del país, porque estas actividades no le competen”.
“La UAGro es una institución educativa respetuosa de las leyes y bajo ninguna circunstancia se prestaría para actividades ilegales, por lo que descalifica los dichos que la involucran”